Es importante que antes de invertir en el hardware, las escuelas de Educación Primaria den algunos pasos básicos para garantizar que sus programas de aviones no tripulados despeguen.
En países como EE.UU. un número cada vez mayor de escuelas de Educación Primaria están trayendo drones al aula a medida que los nuevos casos de uso muestran cuán útiles pueden ser los vehículos no tripulados para enseñar habilidades de ciencia, tecnología, ingeniería, arte y matemáticas. Es una forma de decir: si para una parte del alumnado no hay interés en estas áreas de forma directa, busquemos un camino alternativo, enseñémoslas desde la realidad.
Es de manual afirmar que mientras el alumnado está entusiasmado con la idea de volar robots en clase, los maestros necesitarán sistemas de apoyo para aprender cómo incorporar la nueva tecnología en sus planes de lecciones.
«Es fácil atraer estudiantes y conectarlos con la frescura de los drones voladores. Tenemos que demostrar la conexión de todo esto con la vida real: que un avión no tripulado es una herramienta y que muchas industrias lo utilizan». Esta es la opinión de Duane Roberson, director de educación profesional y técnica de la Escuela del Distrito 11 de Colorado Springs, de EE.UU.
4 claves para pilotear drones en una clase de Primaria
Pero no todo se resume en una cuestión técnica. Hay que tener en cuenta que estamos en un espacio educativo, o haciendo uso de tecnologías para fines educativos.
Esta es la razón por la que hay quien propone una serie de claves para todo esto tenga sentido en estos espacios educativos. Por tanto, antes de que los educadores puedan volar con sus alumnos en la parte posterior de un DJI Phantom 4, hay algunos pasos básicos a seguir para asegurar una lección exitosa:
1. Obtén una licencia como piloto de dron certificado según las regulaciones de cada país. De esta forma, los maestros entienden todos los aspectos relativos a la seguridad y demás regulaciones y dan ejemplo con este tipo de cuestiones.
2. Compra piezas de repuesto: motores de reemplazo que suelen ser muy baratos, engranajes y hélices, igualmente baratas. Que el mantenimiento y reparación de estos drones forme parte de la clase, es la mejor manera de vehicular interesantes aprendizajes.
3. Compra estaciones de carga y baterías adicionales: la batería para drones de nivel de entrada dura entre 6 y 8 minutos, y demora aproximadamente una hora en cargarse. Es bueno tener baterías de respaldo disponibles para las siguientes clases.
4. Crea un consejo asesor: cuando la Escuela del Distrito 11 de Colorado Springs desarrolló su programa, creó una junta asesora formada por expertos en drones en universidades locales y compañías de defensa aeroespacial en la región. Es una buena manera de conectar con la realidad, proveer de experiencia y, también, puede servir para tener oradores invitados.
Sin duda estamos ante una innovación. Pero, ¿hasta qué punto está dispuesto nuestro profesorado de hacer uso de drones para conectar con la realidad y enseñar ciencias, matemáticas y tecnología?
Es importante tener en cuenta que debemos tomar a la escuela como una institución que esté a la vanguardia. En este sentido, la tecnología ofrece una magnífica oportunidad para el futuro de estos niños y niñas que hoy reciben en las escuelas conocimientos elementales y, también, los asoman al futuro. Es la mejor manera de hacerlos protagonistas de verdad.
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