Es necesario desentrañar al máximo los factores relacionados con el fracaso escolar y el abandono temprano o prematuro de los jóvenes. En este sentido, las investigaciones cada vez centran más la atención en aspectos que, aunque se relacionan con un trabajo previo a la escuela y con el proceso de socialización familiar y social, tienen el proceso de escolarización un lugar apropiado para su desarrollo.
Algunos de estos aspectos son el hábito lector y la comprensión oral. Repito, aspectos fuertemente relacionados con el trabajo que se realiza a lo largo de muchas horas dentro de las aulas.
Se ha oído decir que la Educación Primaria existe, fundamentalmente, para garantizar buenas habilidades de comunicación, buenas habilidades para el razonamiento matemático y el aprendizaje de la aritmética básica, un conocimiento, y también respeto, de aquello que rodea al sujeto, etc.
Cuesta comprender, entonces, cómo al final de un proceso largo de 6 años, a lo que hay que sumar el trabajo realizado durante tres años de educación cuasiobligatoria, es decir, el trabajo de la Educación Infantil, estas habilidades de comunicación y capacidad mínima para la aritmética no se hayan conseguido. ¿Qué ha pasado?
Aún no hay respuestas
Este pregunta no hay sido respondida convenientemente. La única respuesta que tenemos, que suele ser habitual, es que los fracasados y sus familias son los responsables. Los primeros porque no estudian, leen, piensan ni trabajan, y las segundas porque están desestructuradas, son irresponsables, no atienden los requerimientos de los profesores, etc. Que pasan bastante de la educación de sus hijos, vaya.
Se oye, aún de lejos, sobre la responsabilidad del currículum existente, las metodologías docentes y la calidad del profesorado. No digo que lo anterior no sea importante, pero no puede olvidarse esto último igualmente.
Cada vez que un profesor habla delante de los padres de «mis alumnos brillantes», en referencia a un grupo de alumnos, deja de considerar al resto como brillantes y, lo que es más importante aún, deja de actuar en consecuencia con ellos, algo que en muchas ocasiones se traduce en una diferencia de trato a cada uno dependiendo de lo que «es considerado» previamente.
Hábito lector escaso y dificultades para la comprensión oral
La escolarización de la población inmigrante debe plantearse, como todo, correctamente. Pocas investigaciones nos hablan del fracaso escolar escolar en los hijos de la población llegada a cada Comunidad Autónoma (en el caso de España).
En España, la «región» con mayor tasa de fracaso escolar es Melilla. En una investigación realizada por varios investigadores (Jiménez, Rico Martín, Sánchez, 2015), donde eran tenidos en cuenta aspectos tales como las características personales, familiares, escolares y capacidades lingüísticas, se llega a conclusiones muy interesantes cuando son contemplados en concreto aspectos tales como el hábito lector y la comprensión oral.
La conclusión no se hace esperar. En el caso de esta ciudad, el perfil de «fracasado escolarmente» corresponde a una persona bereber, sin género definido, de entre 16 y 17 años, que usa el español y el “tamazight” en su vida diaria, y tiene un bajo rendimiento académico. Por otro lado, el nivel de estudios y socioeconómico familiar es bajo.
Y, atención, en relación a las capacidades lingüísticas, el hábito lector de estos jóvenes era muy escaso, al tiempo que tenían importantes dificultades en su comprensión oral. ¿Pueden superarse los objetivos de la educación formal y reglada con estos serios inconvenientes? De ningua manera.
Y otra investigadora se reafirma
Y así, cuantas investigaciones queramos contemplar. Afirma otra investigadora (Cervera, 2017):
El presente estudio nace en esta encrucijada, pues la investigadora, docente de Lengua Castellana y Literatura, impartía clase en un centro de compensatoria donde las carencias del alumnado en habilidades, recursos y competencias eran indiscutibles, el hábito lector inexistente y el proceso de enseñanza-aprendizaje estaba lleno de dificultades. Las características académicas, familiares, sociales y económicas de los estudiantes eran tan complejas que un tratamiento didáctico tradicional habría sido un fracaso tal y como indicaban los resultados que se habían cosechado hasta entonces.
¿Cómo hemos podido llegar hasta aquí? Pero, antes de responder la pregunta… a pesar de todo, el tratamiento didáctico no se modifica. ¿Qué falta para dar el paso?
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Para saber más
Cervera Mata, T. (2017). La animación a la lectura en la mejora de actitudes y de la expresión escrita en la Educación Secundaria Obligatoria. Granada: Universidad de Granada. Tesis doctoral.
Jiménez Jiménez, Mª Ángeles; Rico Martín, Ana M. y Sánchez Fernández, S. (2015). Estudio del perfil lingüístico de los jóvenes que abandonan prematuramente la escuela. Publicaciones. Facultad de Educación y Humanidades del Campus de Melilla, vol. 45.